La potencia sin control no sirve de nada

Ya lo advertía Pepe Borrull, entrenador del Nou Basquet Alzira, camino de Villanueva de Castellón para la disputa del partido. "Este partido debe ser como un entrenamiento, no sirve para nada querer seguir un sistema si es a costa de olvidarnos de jugar a baloncesto". Los jugadores alzireños, conocedores del potencial local, salieron a intentar jugar un partido serio, evitando los errores del encuentro contra el Alcasser y las sensaciones de relajación dadas durante esta última semana de pretemporada.

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Los primeros minutos fueron para los castellonenses pero a medida que pasaron los minutos los visitantes fueron aumentando el nivel de intensidad defensiva y la velocidad en ataque. El peor estado físico de los recien ascendidos a preferente y las licencias arbitrales convirtieron la zona alzireña en un fortín y consiguieron dejar al equipo de Juan Carlos y Artur, principales valores ofensivos, en un triste 17-31 al descanso.

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La segunda parte fue un calco de la primera, seguridad defensiva del Nou Basquet Alzira en la que destacaron los hombres interiores, anticipándose a sus rivales para lanzar transiciones rápidas, y una mayor fluidez de balón en ataque que bastaron para mantener la renta conseguida hasta el final del partido, haciendo inservible la tímida reacción local en los últimos minutos a cargo de Juan Carlos desde la línea exterior. Al final 45-56 en una complicada pista en la que pese a que el Borts Brots Castelló no supo mostrar todo su potencial servirá para que los alzireños comiencen la temporada con confianza y un balance positivo en los partidos de pretemporada (3-2).

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Cabe destacar que todos los jugadores del Alzira anotaron en el partido de ayer con lo que el peso ofensivo quedó repartido entre todos, algo inédito en los últimos años, destacando la actuación tanto en ataque como en defensa del ala-pivot Raúl Cebrián. Carles Romero con molestias en su tobillo disputó varios minutos pero tuvo que retirarse como precaución de cara al inicio de la liga.